Para dar comienzo al primer porteo oficial del 4 de julio, nos reunimos parte de los participantes en Zuriza el viernes. Cenamos en el camping y comentamos un poco el trabajo del sábado.
Hay avisos de altas temperaturas así que decidimos aprovechar bien la mañana. Nos
juntamos en Linza el sábado 23 porteadores, pero por Belagua
suben tres porteadores más haciendo el último reconocimiento del camino para
decidir si las mulas pueden subir o no.
Los que quedamos en Linza repartimos
los bultos, mayoritariamente comida no perecedera y material de espeleo de los grupos.
Como en años anteriores volvemos a dar el espectáculo por el camino de la Mesa
con nuestros bidones a la espalda.
A pesar del número de voluntarios no se
consigue llevar todo en un solo porteo.
En unas dos horas nos planatamos en la Hoya. Después de un pequeño descanso nos repartimos diversos
trabajos. Cuatro espeleos y cinco porteadores se irán hacia la BU-56 para
instalar todo lo que sea posible. Viendo la cantidad de gente que hay, cinco
valientes bajan a Linza de nuevo para un segundo porteo.A estos cinco se les unirán otros dos del
Burnia, así que entre siete realizarán el segundo viaje.
Los de la Hoya se esmeran en hacer el agujero de la
letrina, ordenar la comida, que guardan en la cueva del material, en la que aún queda un nevero, y el resto
hacen agua en la fuente.
Para las 19h todos los trabajos de superficie han
finalizado y se baja a Linza. Los cuatro espeleos salen a las 20 h de la sima y
para las 23,30h llegan a Zuriza. Cansados pero han conseguido llegar hasta
cerca de -300.
Cenamos y nos despedimos, volveremos a vernos el día
18, y con mulas.
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